Todas las claves para el nuevo plan de ampliación del Hospital de Cabueñes: "se tramitará de inmediato"

El primer encargo para que Tragsatec revise el estado actual de la paralizada ampliación de Cabueñes se tramitará "de inmediato" con la previsión de que en junio pueda iniciarse la redacción del nuevo proyecto, lo que permitiría reactivar la obra el año que viene. Así lo señaló ayer Concepción Saavedra, consejera de Salud, ante la que fue la primera comisión de seguimiento por el fiasco de la actuación celebrada en el centro de salud de Severo Ochoa y con representantes sindicales, sanitarios y vecinales. Saavedra señaló que en este nuevo proyecto se explorará la posibilidad de sumar una planta más al edificio de la ampliación, algo que reconoció que "ya se tenía pensado" antes de romper las relaciones con la UTE que tenía adjudicada la obra. Esa nueva planta, detalló, servirá para reorganizar espacios e incrementar entre otros los destinados a UCI y reanimación, claves para el aumento de la actividad quirúrgica. Según se detalló después en la reunión, que se celebró a puerta cerrada, esta nueva planta ocupará 3.000 metros cuadrados y no se elevará en altura, sino ampliando el recorrido de la sexta, que hasta ahora coronaba el edificio de manera escalonada.

Además, Salud tiene previsto iniciar ya tareas en el actual hospital para una "reorganización" de espacios que, según lo detallado por Saavedra, parece apostar por la liberación de áreas no asistenciales. Mencionó la consejera, por ejemplo, la existencia de zonas de archivos que pueden externalizarse. El personal del hospital detalló después que parte de esos archivos ya se han enviado a un almacén, pero que aún queda algún área de almacenaje en uno de los sótanos. El objetivo, en cualquier caso, es ganar espacio para que Cabueñes tenga su planta de Psiquiatría, tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA hace unas semanas. "Entre lo que vamos a ampliar y la reorganización, esperamos tener una planta de Psiquiatría en el nuevo hospital", aseguró Saavedra.

La hoja de ruta defendida ayer es la que ya había adelantado en el consejo social del pasado enero, una cita en la que, de hecho, Saavedra se había comprometido a convocar la comisión de seguimiento ahora constituida. De acuerdo a este plan, la reactivación de las obras de Cabueñes se articula bajo dos encargos, ambos a Tragsatec, un medio público. El primero se iniciará "de inmediato" y servirá para tener un primer diagnóstico del estado actual de la ampliación. Los técnicos realizarán un estudio topográfico para evaluar las áreas ya construidas y perfilarán un estudio básico en el que se adelantarán aspectos que no se incluían en la primera fase de la actuación, como es el caso de las llamadas "zonas grises", que son las áreas de hemodiálisis, laboratorio, farmacia y hospitalización, y que iban a diseñarse más adelante.

Después, ya en primavera, se encargará la redacción del proyecto como tal, previsiblemente en junio. De acuerdo a estos plazos, sigue encima de la mesa la intención de reactivar los trabajos el año que viene, aunque buena parte de los convocados ayer dudan aún de estas estimaciones. "En paralelo", además, se retomarán los trabajos para "definir el anillo de circunvalación" que estaba pendiente de diseñar para el futuro hospital y por el que ya ha habido "varias reuniones" con el Ayuntamiento.

Se reafirmó también Saavedra en su intención de lanzar "proyectos acelerados", en concreto, los tres ya anunciados: el traslado de la Facultad de Enfermería a la Laboral –dijo la consejera que "en días" tendrá listo el plan funcional–, la tramitación del proyecto para el nuevo aparcamiento del hospital –que se licitará de manera independiente a la ampliación– y las obras en el centro de especialidades de Pumarín, que acogerá el nuevo centro de salud de Perchera, el hospital de día infanto-juvenil y siete consultas de salud mental que empezarán a habilitarse ya este año.

Siguen las dudas, sin embargo, respecto a las relaciones con la UTE que tenía adjudicada la obra y a quien el Principado achaca la responsabilidad de la resolución del contrato. La UTE ha alegado contra este trámite y pide la resolución del contrato por causas achacables a la administración. Según los asistentes a la reunión, la consejera ayer se mostró confiada en que la disputa no frenará los trabajos. Parte de estas discrepancias, no obstante, ya están judicializadas.

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