La exsecretaria general del PP Dolores de Cospedal: "No he impulsado ninguna 'Operación Cataluña'. Es una ficción”

La exsecretaria general del PP María Dolores de Cospedalcoincidió con el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy en negar más 'Operación Cataluña' que el 'procés' independentista. “Yo no he impulsado ninguna 'Operación Cataluña', que es una ficción”, aseguró la exresponsable del PP, que admitió entre seis y nueve reuniones con el excomisario José Manuel Villarejo, cuya "calidad como persona" se conoció mucho después, y aseguró que nunca le contó nada que no se hubiera publicado. Más adelante también negó la existencia de una "policía política o paralela", cuyo objetivo fuera ayudar al Partido Popular con prácticas cuando menos cuestionables o espiando a rivales políticos, como independentistas o dirigente de Podemos.

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Cospedal basó sus respuestas a preguntas concretas sobre las grabaciones de Villarejo en que se fía más "de su memoria" que en lo que pueden publicar los medios a partir de las agendas de Villarejo o en audios, cuya custodia no se ha controlado y pueden estar manipulados. A continuación aseguró que no recordaba los términos que utilizó en sus conversaciones con el expolicía, que aseguró que entonces no estaba en activo. Sí negó categóricamente haber propuesto a Villarejo entrevistarse con la que era líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho.

Tuvo que dejar los monosílabos con los que intentó responder a las preguntas de los diputados, para recordar que se reunió con Villarejo cuando todo el mundo lo hacía, porque quería saber de dónde salían las filtraciones que se producían del procedimiento abierto por corrupción contra la que había sido alcaldesa de Valencia Rita Barberá, que cree que "murió del ataque que sufrió".

"Yo no he encargado nada que se llame 'Operación Cataluña' ni para hablar con jueces, ni con policías, porque mi competencia no es policial", se revolvía periódicamente Cospedal cuando los diputados intentaban enfrentarla al contenido de audios concretos de sus encuentros con Villarejo. "Bajo mi mandato a esa señora no se le pagó", sostuvo sobre los fondos reservados que recibió Vicky Álvarez, expareja de Jordi Pujol Ferrusola, para que denunciara que le acompañó a Andorra con dinero en efectivo, según consta en las agendas y audios del principal imputado en la causa en la que se investigan las cloacas del Estado. Negó conocer al empresario Javier de la Rosa, que, según los apuntes de Villarejo, le proporcionó información sobre la familia del expresidente catalán Jordi Pujol.

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"No voy a dar ningún valor a eso que dice que son conversaciones. Nunca he hablado con Fiscalía, que no sé qué tiene que ver el señor [Luis de] Guindos, porque era ministro de Economía y no de Justicia", respondió Cospedal al portavoz de Junts, Josep Pagès, que a continuación le preguntó si había hecho que su exmarido, el empresario Ignacio López del Hierro, cobrara de la empresa pública Enresa, según asociaciones ecologistas. Cospedal lo negó, pero añadió que si le estaba imputando un delito que acudiera a los tribunales y ahí le respondería. Tachó de "machista" el intento de atribuir cierta autoridad a López del Hierro en el PP, a la vez que negó que él en algún momento actuara como su portavoz o mediador.

"Tenía confianza en que el Gobierno de Rajoy, como fue a continuación, cualquier ataque que viniera del independentismo que promoviera un golpe de estado lo frenaría. Yo no tenía por qué no confiar en el señor [Jorge] Fernández Díaz y en los demás ministros del Ejecutivo", lo que extendió a la entonces vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz Santamaría. "Sigo confiando en el liderazgo del señor Rajoy para utilizar todos los medios del Estado para frenar un intento de golpe de Estado, con todos los resortes del Estado, como la aplicación del artículo 155", respondió al representante de ERC, Francesc Marc Álvaro.

"El golpe de Estado"

"El independentismo excluyente es lo peor que le puede pasar a un país", llegó a decir Cospedal, que negó tajante "haber dado ninguna instrucción a ningún miembro o institución del Gobierno" para investigar al presidente de ERC, Oriol Junqueras, o su familia, según un audio publicado por Rac1. "No reconozco la veracidad de esos audios, cuya cadena de custodia no sé si se ha respetado", se parapetó la compareciente, que llegó a decir que "el PP era el partido que más había hecho por la democracia", lo que le fue reprochado por el diputado del PSOE Manuel Arribas, a cuyas preguntas negó haber mantenido reuniones sobre la 'Operación Cataluña' o haber autorizado la compra del software de Pegasus para espiar a políticos catalanes.

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A la pregunta de si había hablado con Rajoy sobre el 'procés' respondió con un "faltaría más ¿Cómo no se va a hablar del 'procés' si el independentismo quería dar un golpe de Estado?". Lo relacionó con la aplicación del artículo 155 que retiró las competencias a la Generalitat. Y no cayó en la trampa de no poner al mismo nivel "la unidad de España y las garantías democráticas" al ser preguntada sobre qué era más importante.

Cospedal, que se declaró firme defensora de la separación de poderes y de la Justicia, insistió en sus respuestas a los diputados que el PP no había sido condenado como organización criminal ni por financiación ilegal. Se basa en que la sentencia de la primera época de la Gürtel, que provocó la moción de censura que echó a Rajoy de la Moncloa, declaró probada la existencia de la caja b, pero no condenó al PP por este delito, porque entonces no se podía perseguir por él a partidos. Por eso se limitó a declarar al partido responsable a título lucrativo de parte del dinero invertido en la campaña electoral en los pueblos madrileños de Majadahonda y Pozuelo de Alarcón.

El colofón de la comisión lo puso el portavoz de Junts, que pidió a la Mesa, en su nombre y en el de ERC y Bildu, que valore si debe trasladar las palabras de Cospedal a la Fiscalía para determinar si son constitutivas de delito, en concreto, lo referido a los pagos a quien era su marido a través de una empresa pública.

La exsecretaria general del PP se permitió el lujo de señalar que había negado la existencia de una policía patriótica "al menos en ese momento", porque ignoraba si se había puesto en marcha con el Gobierno del PSOE y aprovechó su última intervención para reprochar que "por siete votos" las Cortes hubieran dejado de cumplir su función de aprobar los presupuestos generales y controlar al Gobierno.