El Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) implantará por primera vez los cribados para detectar la diabetes tipo 1 en los familiares de pacientes ya diagnosticados, tanto niños como adultos. Estas pruebas estarán disponibles en las próximas semanas y se destinarán a los hermanos y a los padres, siempre que tengan menos de 45 años. El proceso consistirá en hacer un análisis de sangre para detectar si tienen anticuerpos específicos contra las células betapancreáticas, que son las que producen insulina. En el caso de que el resultado fuese positivo se procedería a hacer un seguimiento y a poner en marcha las correspondientes estrategias de prevención.

Este tipo de cribados beneficiaría a cerca de 250 familias en todo Asturias. Aunque en un principio se pondrá en marcha en el HUCA, la intención del hospital es llegar a todos los afectados, por lo que están estudiando crear un QR para que la población pueda solicitarlo.

Así lo anunció ayer Isolina Riaño Galán, especialista en Endocrinología y Diabetes Pediátrica del área de Gestión Clínica de la Infancia y Adolescencia del HUCA, durante su intervención en la tercera jornada de la X Semana de la Ciencia «Margarita Salas» de LA NUEVA ESPAÑA. Esta iniciativa, patrocinada por el Ayuntamiento de Oviedo, el Ayuntamiento de Gijón, el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, Bayer, Asturagua, Química del Nalón, Telefónica, Gilead, EUDCAE y Fertiberia, que cuenta, además, con una subvención de la Consejería de Ciencia, Innovación y Universidad del Principado.

«La gran noticia es que los avances de los últimos años nos permiten, a través de la inmunoterapia, modular el avance de esa destrucción de las células pancreáticas», explicó Riaño. Hasta ahora «muchas familias, al diagnosticar a su hijo o a su hija de diabetes, tenían la preocupación de si otro hermano podría también tener la enfermedad. Pero, realmente, hacerle el análisis, aunque tuviese los anticuerpos positivos, no podíamos ofrecerle nada. Por lo tanto, sería estar ahí de espectadores pasivos hasta que ocurriese la historia natural. En cambio, ahora, tenemos la oportunidad de frenar ese avance».