Investigación

Un hombre mata en Murcia a la hija adoptiva de 5 años de su expareja

El sospechoso ha sido arrestado en Torrevieja y la Guardia Civil investiga las circunstancias de la muerte de la menor

Mata a la hija de su expareja en Llano de Brujas

Mata a la hija de su expareja en Llano de Brujas / Redacción

La Guardia Civil ha arrestado este martes en Torrevieja (Alicante) a un hombre de 48 años de edad, Jesús J. G., acusado de haber acabado con la vida de una niña de 5 años, hija adoptiva de su expareja, en un piso de Murcia.

El sujeto, tras perpetrar presuntamente el crimen, había escapado. La Guardia Civil de Murcia, tras tener conocimiento de que el presunto autor de los hechos pudiera estar en Torrevieja, se ha coordinado con la Benemérita de la localidad alicantina, que ha procedido a la detención del sospechoso.

El cadáver de la menor, hija biológica de una prima de la mujer, lo descubrieron los padres del sospechoso, que también viven en la vivienda, en la pedanía murciana de Llano de Brujas. Al escenario se movilizaron agentes de la Benemérita y de la Policía Local de Murcia, así como una ambulancia, cuyos sanitarios solo pudieron certificar el deceso, aunque intentaron reanimar a la niña (cuyo cuerpo se encontraba en uno de los dormitorios). “Está durmiendo”, llegó a decir la mujer que halló el cuerpo, “pero está echando espuma por la boca”, añadió.

En cuanto al método, el hombre habría empleado pastillas o veneno, apuntan fuentes próximas a la investigación. Habrá que esperar al resultado de la autopsia para concretar qué sustancias eran: no se descarta que fuesen drogas. Se sabe que en el dormitorio donde se encontró había vómito de la pequeña. Asimismo, fuentes cercanas a la investigación apuntaron que se encontró una tableta vacía de un fármaco perteneciente al grupo de las benzodiazepinas.

Los hechos se produjeron en el domicilio de los padres del sospechoso. La pequeña residía con su madre adoptiva en otra pedanía.

Después de cometer el crimen, el individuo llamó por teléfono a su antigua novia y le contó lo que había hecho.

Fuentes cercanas al caso indicaron que no se descarta que el hombre cometiese el crimen para hacerle daño a su expareja.

En manos de los investigadores hay mensajes, aportados por la madre adoptiva de la víctima, en los que el sujeto se muestra celoso y le expresa sus temores de que estuviese con otro hombre. El sospechoso, además, tendría graves problemas de adicciones a las sustancias estupefacientes.

"Era mi vida"

Mientras agentes de la Policía y la Benemérita custodiaban el portal, tras acordonar la zona, en una calle contigua, la mujer lloraba y gritaba, mientras sus allegados trataban de consolarla. “¿Por qué me ha hecho esto? Me ha quitado la vida”, clamaba la mujer. A su lado, una familiar comentaba que Jesús recogió a la niña del colegio y se la llevó a casa de sus progenitores.

“Era mi vida esta cría”, seguía llorando la mujer. “Yo confiaba mucho en él”, insistía a voz en grito, apoyada en un automóvil, mientras se preguntaba “cómo ha podido hacer este hombre esto, cómo se le ha ido la cabeza”.

Numerosos vecinos de Llano de Brujas se agolpaban en la vía pública, junto a la calle peatonal denominada Travesía José Antonio. Los agentes movilizados a la zona llegaron a llamar la atención a algunos de ellos que estaban demasiado cerca del cordón policial.

A las nueve y media de la noche se producía el levantamiento del cuerpo de la niña. Los restos mortales de la menor fueron trasladados en un furgón hasta el Instituto de Medicina Legal de Murcia, donde le será practicada la autopsia que confirme de qué murió.

“Ya no voy a comprar más leche para ella”, se lamentaba Ramona, en el exterior de la vivienda, sujetada por dos mujeres, porque apenas se tenía en pie. “Madre mía por qué me ha hecho esto, por qué me ha quitado a mi hija, por qué”, repetía la mujer.

Tracking Pixel Contents