Un derbi con dos luchas: el ascenso y la salvación

El José Ramón Suárez de San Claudio, en Oviedo, acogerá este domingo a las 17 horas un nuevo capítulo del derbi asturiano femenino entre el Real Oviedo y el Sporting, un duelo marcado por las urgencias de ambos equipos, aunque con metas muy distintas. Las azules llegan como líderes del grupo 1 de Segunda Federación, peleando por dar el salto a Primera Federación. Las rojiblancas, en cambio, afrontan el partido desde la decimotercera posición, a tan solo un puesto del descenso a Tercera Federación.

El contraste en la tabla no empaña la intensidad ni el equilibrio que puede tener el choque. De hecho, esta temporada el Sporting ha salido vencedor en los dos encuentros previos: el primero, en Copa de la Reina, con un contundente 2-4 en el Tartiere, y el segundo, en Liga, por 2-0 en Mareo. Las estadísticas están ahí, pero el contexto ahora es otro.

"El equipo afronta este tramo final de Liga como el sprint para lograr nuestra meta", apunta Andrea Suárez, entrenadora del femenino azul. "Comenzando por la de este domingo en el derbi, un partido especial por todo lo que conlleva, emocional y futbolísticamente. Tenemos ganas de que llegue la hora de saltar al verde de San Claudio". El cuadro ovetense ha hecho del feudo azul una fortaleza, y la confianza es total en esta recta final. "Hemos trabajado mucho para estar en la situación que estamos y gestionamos la presión como un privilegio que nos hemos ganado, y como el camino para lograr nuestro objetivo", añade Suárez.

Enfrente, un Sporting que llega tocado por las bajas –la de Antía será especialmente sensible, una de las mejores hasta que cayó lesionada–, pero con el carácter que exige un derbi y la necesidad de puntuar. También el Oviedo tiene ausencias importantes, como la de Ana Buceta, aunque ambas plantillas han demostrado saber recomponerse.

"Afrontamos el derbi, yo creo que los dos equipos con la necesidad de intentar sumar los tres puntos", señala Sergio Pérez, técnico del Sporting Femenino. "El curso ya prácticamente está llegando a su fin y tanto un equipo como el otro necesita puntos para confirmar sus objetivos. Un partido que espero que sea realmente complicado, porque lo vieron en su casa, es un equipo muy fiable y va con una dinámica de juego y de resultados que hacen que sea un equipo temible", insiste.

El Sporting no renuncia a dar la sorpresa, aunque sabe que para lograrlo necesita reencontrarse con la solidez defensiva y el esfuerzo colectivo que le permitió encadenar cinco victorias consecutivas en la primera vuelta. "Con muchas ganas de afrontar ese partido, de ser capaces de ser un equipo rocoso, incómodo para ellas y, por supuesto, con nuestras armas para poder ganar", explica Pérez. "Espero un partido muy disputado, que seamos capaces de sostenernos en el juego y que, por qué no, vamos a intentar dar la sorpresa y llevarnos los tres puntos", señala.

En ese sentido, el técnico rojiblanco no esconde la importancia del calendario que les queda. "Nos enfrentamos ante rivales directos como el Cornellá y Osasuna y esperamos estar a la altura para poder competirlo y certificar un año más en Segunda Federación. Las lesiones nos hicieron bajar bastante el nivel competitivo, pero también nos permitieron conocer a otras chicas del B, que nos dieron mucho. Podemos decir que a estas alturas los deberes los tenemos medio hechos. Nos falta el final y pegar un buen arreón", cuenta.

El derbi llega cargado de emoción, de cuentas pendientes (especialmente para el Oviedo) y de realidades opuestas. Para el Oviedo, un paso más hacia el sueño del ascenso. Para el Sporting, una batalla vital para no caer al abismo. San Claudio dictará sentencia.

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