El papa Francisco, ingresado por una bronquitis: suspende su agenda hasta el lunes

El Papa ha sido ingresado este viernes en el hospital Gemelli de Roma. De acuerdo con la oficina de prensa del Vaticano, el motivo de la hospitalización del Pontífice es una "infección en las vías respiratorias" a causa de una bronquitis y una "leve fiebre". Con ello, Francisco "se ha sometido a exámenes especializados y ha iniciado terapia farmacológica hospitalaria".

El Vaticano no ha informado sobre cuánto tiempo permanecerá ingresado en la décima planta del hospital romano, donde suele alojarse. De momento, la Santa Sede solo ha explicado que se ha suspendido la presencia del Papa en tres actos hasta el lunes, cuando tenía previsto un encuentro con artistas que ha sido cancelado. 

De igual manera, también se ha anulado la audiencia jubilar del sábado, así como una misa programada para el domingo –y que asimismo debía contar con su presencia–, que será presidida por el cardenal José Tolentino de Mendonça, prefecto (ministro) del dicasterio para la Cultura y la Educación. Aun así, el Papa se encuentra "tranquilo y de buen ánimo" y ha leído "algunos periódicos", según ha comunicado el portavoz Matteo Bruni.

"Alerta pero con dificultades al hablar"

Consecuencia inmediata del nuevo achaque del Papa ha sido también que la oficina de prensa vaticana anunciara que sus oficinas permanecerían abiertas, de manera excepcional, durante la tarde del viernes. Algo que también remite a la gran atención mediática y a las especulaciones que la noticia ha puesto en marcha. El diario italiano 'La Repubblica', por ejemplo, ha publicado que fuentes cercanas al Papa hablan de un ingreso de cinco días.  

“He visto al Papa mentalmente alerta pero que tenía muchas dificultades para hablar debido a sus problemas respiratorios”, ha dicho, por su parte, Christopher Lamb, corresponsal de la CNN en el Vaticano, tras asistir por la mañana a una audiencia que Francisco mantuvo con Mark Thompson, presidente de esa cadena. Lamb confirmó así lo que muchos vaticanistas han estado señalando en los últimos días: el aspecto cansado del Papa y su rostro hinchado, probablemente a causa de la cortisona que le han proporcionado contra la infección respiratoria. 

88 años

De hecho, el estado de salud de Francisco, de 88 años y que arrastra diversas patologías, volvieron a causar preocupación en los últimos 10 días. Los primeros rumores sobre la nueva indisposición sufrida por el Papa surgieron ya la semana pasada, cuando el Pontífice empezó a manifestar en público los primeros síntomas de una fuerte gripe. Aun así, el pasado domingo, quiso presidir una misa en la plaza de San Pedro, con ocasión del jubileo de las Fuerzas Armadas, durante la cual finalmente él mismo confesó que tenía "dificultades al respirar".

Posteriormente, el miércoles, el Papa pidió en el último momento que un sacerdote leyera en su lugar su discurso durante el tradicional Ángelus que se lleva a cabo ese día. "Déjenme pedirle al padre que continúe leyendo porque aún no puedo con mi bronquitis. Espero que la próxima vez pueda", se justificó entonces.

Con todo, no es la primera vez que el Papa alarma por sus problemas de salud. Ya en marzo de 2023 tuvo que ser ingresado en Gemelli precisamente por una infección respiratoria. Y, en noviembre de 2023, por consejo de los médicos, también canceló su viaje a Dubái para la COP28 a causa de otra "bronquitis aguda e infecciosa”.