El Musel responde a Moriyón que la decisión sobre Naval Gijón la tomará el consejo

La nueva dirección de la Autoridad Portuaria de Gijón respondió ayer, a través de un comunicado, a las manifestaciones públicas de la alcaldesa y la vicealcaldesa de Gijón, señalando que será el consejo de administración del Puerto el que adopte una decisión sobre la franja destinada al futuro paseo marítimo en Naval Gijón. La propuesta que se va a votar la formulará la nueva dirección portuaria encabezada por Nieves Roqueñí tras analizar el informe jurídico elaborado por el Ayuntamiento que dice que el Puerto está obligado a cederle esa franja tal como se había negociado con el anterior presidente del Puerto, Laureano Lourido. Los nuevos vientos en los despachos portuarios han llevado a dar un giro de 180 grados y a optar por intentar conservar esa franja colindante con la dársena del antiguo astillero, para urbanizar el paseo y colocar unos pantalanes en el agua.

La dirección portuaria afirma que "desde el Musel se desconoce el contenido del informe de la Secretaria municipal acerca de las actuaciones patrimoniales y urbanísticas", añadiendo que "una vez esté en su poder y haya sido analizado, junto con el resto del expediente, se llevará la propuesta resultante al consejo de administración de la Autoridad Portuaria, tal y como marca la normativa". El asunto ya se planteó en la reunión del consejo del pasado 31 de marzo, pero sin adoptar decisión alguna, sólo como una mera información a los consejeros del cambio de planes de la Autoridad Portuaria de Gijón para esa franja de terreno, englobados dentro de un proyecto más amplio de contribución a la ciudad.

Horas después de la rueda de prensa del gobierno local, desde la Autoridad Portuaria se trasladó que "se ratifica plenamente el compromiso con Gijón y con la apertura al uso y disfrute por parte de la ciudadanía de los antiguos terrenos de la concesión de Naval Gijón. Esta apertura habrá de hacerse con todas las garantías y en el menor tiempo posible para que se pueda disfrutar no solamente del paseo sino también del aprovechamiento de la lámina de agua de la dársena que pertenece al dominio público portuario".

El viraje del Puerto en cuanto a la franja de 9,3 metros de ancho más próxima a la dársena de Naval Gijón, cuyo control ahora la Autoridad Portuaria quiere conservar, llega después de que el expediente para la cesión gratuita al Ayuntamiento de ese terreno destinado a formar parte del paseo marítimo gijonés hubiera culminado todos los trámites, salvo la aprobación de la cesión por parte del consejo de administración del Puerto. El último de ellos fue el visto bueno de Patrimonio del Estado (Ministerio de Hacienda), en febrero. Ahora el Puerto trasladará a Hacienda su cambio de criterio. El cambio de criterio de la nueva dirección de El Musel cuenta con el respaldo del Principado, que es quien cesa y nombra presidentes portuarios y cuenta con la representación más numerosa en el consejo.

La intención de El Musel de asumir la urbanización de los 3.848 m2 en Naval Gijón que la anterior dirección preveía ceder al Ayuntamiento, adelantada por LA NUEVA ESPAÑA el pasado 16 de marzo, no sólo tendrá que sortear el informe jurídico elaborado por el Ayuntamiento, sino también lograr el visto bueno de Madrid por parte de la Comisión Normalizadora que tiene intervenidas las cuentas del Puerto a raíz del préstamo de 215 millones que el Estado le concedió para pagar los sobrecostes de la obra de ampliación de El Musel, y de Puertos del Estado al tener que cambiar el Plan de Empresa.