El final de las obras del colegio de Nuevo Roces se retrasa cinco meses

La constructora solicitó una ampliación del plazo por las condiciones de la parcela y demoras en permisos de un proyecto cuya conclusión se fijaba para octubre

Las obras del futuro colegio público de Nuevo Roces, en la calle Benito Otero Martínez. | JUAN PLAZA

Las obras del futuro colegio público de Nuevo Roces, en la calle Benito Otero Martínez. | JUAN PLAZA

Nuevo Roces

El futuro colegio público de Nuevo Roces deberá esperar un poco más. La conclusión de la obra (que arrancó en octubre de 2023) estaba marcada para octubre de este año, pero una ampliación del plazo, de cinco meses, solicitado por la constructora Citanias marca ahora que los trabajos concluirán a finales de febrero de 2026. La empresa se topó con dificultades técnicas con la excavación y los muros de contención durante la primera fase de construcción en el marco de un proyecto "complejo" pues buena parte de la estructura está semienterrada.

Citanias, apuntan fuentes de la Consejería de Educación, justificó la petición de un mayor margen para acometer la tarea por, fundamentalmente, tres motivos. En primera instancia, por los retrasos en la concesión de la autorización para instalar las grúas necesarias. También por la demora en la instalación de la acometida eléctrica de obra definitiva por parte de la compañía distribuidora. Y, por último, por las condiciones de la parcela, de casi 15.000 metros cuadrados en la calle Benito Otero Martínez, en la que se erigirá un colegio que cuenta con un presupuesto de 16,52 millones, la mayor inversión realizada por el Gobierno del Principado en un colegio público y cuya financiación se distribuye entre 2023, 2024 y 2025 y ahora 2026.

Para el curso 2026-2027, es decir, el siguiente curso a la finalización de la obra, sigue prevista la inauguración de un centro diseñado por el arquitecto Jovino Martínez Sierra y que tendrá tres plantas sobre rasante y un sótano, además de una pista deportiva semienterrada y cubierta con un plano verde y una grada. Habrá 9 aulas de Educación Infantil y 18 de Primaria, así como áreas para nuevas tecnologías y música, gimnasio, vestuarios, comedor, biblioteca, un salón de actos, salas de visita y despachos. El centro será accesible y ofrecerá espacios "heterogéneos" para fomentar la convivencia del alumnado, como las "súperaulas", que duplicarán el tamaño de las convencionales. También habrá una plaza interior situada en el vestíbulo principal.

Los trabajos, "a buen ritmo"

Las obras, remarcan fuentes de la Consejería de Educación, "avanzan a buen ritmo". Se ha certificado ya más del 40 % del presupuesto de un proyecto que requirió, entre otras cosas, el permiso de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea. Todavía queda, no obstante, tajo por hacer, como todo el interior, acabados, aseos, la cubierta vegetal... La actuación comenzó a finales de 2023 con el movimiento de tierras, tras el que se produjeron posteriormente labores de saneamiento. Aseguran fuentes de la constructora que las lluvias concentradas en determinada época complicaron sobremanera esos trabajos iniciales, con el problema añadido del tramo semienterrado que contempla el proyecto.

Entre 110 y 130 operarios trabajan diariamente en las obras, que, una vez terminadas, darán paso a la preparación para el curso 2026-2027, con la colocación del mobiliario y los equipamientos pertinentes para echar a andar un centro que se ajusta a criterios de "sostenibilidad y eficiencia energética, flexibilidad de espacios, aplicación de metodologías innovadoras y apertura a la comunidad" en el barrio más joven de Gijón.

Tracking Pixel Contents