La iglesia de San Juan de Oceño recupera su esplendor

El templo ha sido rehabilitado gracias a una iniciativa de voluntariado impulsada por el cabraliego Daniel Rojo, capellán en la Universidad CEU San Pablo de Madrid

Ramón Díaz

Ramón Díaz

Oviedo

La iglesia de San Juan de Oceño, localidad del concejo de Peñamellera Alta, ha recuperado su antiguo esplendor gracias al proyecto "Patrimonio que da vida", una iniciativa de voluntariado impulsada por el padre Daniel Rojo, capellán en la Universidad CEU San Pablo de Madrid, natural de Cabrales. La reinauguración del templo tras su restauración será el próximo sábado, día 8, a las 13:00 horas.

Presidirá la misa solemne, con gaita y tambor, el vicario general Adolfo Mariño, y concelebrarán el párroco de la Unidad Pastoral de las Peñamelleras Alta y Baja, Steven Rivas; el abad de Covadonga, David Cueto; el párroco de Cabrales, Pedro Fernández, y el propio Daniel Rojo.

Está prevista la presencia de 20 alumnos y profesores de la Universidad CEU San Pablo que este verano trabajaron en la restauración. Acudirán también representantes de la iniciativa "Patrimonio que da Vida" el alcalde de Peñamellera Alta, José Antonio Roque; y la coordinadora de Pastoral de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Carmen Montesino-Espartero.

Los vecinos han preparado una espicha para agasajar a los presentes en agradecimiento por el trabajo y esfuerzo realizado.

Durante dos veranos, alumnos y personal de CEU San Pablo han acudido a la comarca oriental de Asturias para acondicionar iglesias rurales y apoyar a los párrocos de la zona. En Oceño, repasaron los tejados y lijaron y barnizaron las superficies de madera, además de acometer la pintura del interior.

Según la profesora Elena Cebrián, de la Comisión de Comunicación, "el espacio natural de Oceño, que impacta por su belleza, también hace necesaria la pregunta por el sentido de la realidad. Una pregunta que me parece tremendamente universitaria, como también lo es la propuesta de servicio que incluye el campo de trabajo: profesores, alumnos y personal que salen al encuentro de la realidad y se ofrecen a colaborar para resolver los problemas que descubren".

La alumna Ariadna Luengo afirma que una vez acabados los exámenes quería volver a visitar "este lugar tan especial. Aunque esos días yo estuve de voluntaria en la residencia de ancianos de Póo de Cabrales, tengo ganas de poder ver la obra que hicieron mis compañeros".

Tracking Pixel Contents