Faltan menos de dos meses para que el soterramiento de Langreo entre en servicio (la fecha fijada para su utilización por parte de los viajeros es el 12 de mayo) y se agilizan las tareas para tenerlo todo listo. Después del hito que supuso el pasado lunes el paso del primer tren para realizar pruebas de circulación, los trabajos seguían ayer en el exterior del falso túnel para continuar retirando la catenaria del antiguo trazado y para conectar un sistema para combatir posibles incendios. Este sistema consta de dos grandes depósitos de agua, uno a cada extremo de entrada a la galería subterránea, que alimentarán las bocas de riego repartidas por el interior del túnel. Las tareas se centran en completar la conexión de los depósitos con esos hidrantes, con el objetivo de contar con suministro de agua en caso de incendio. No son los únicos trabajos que se desarrollan en la galería subterránea aprovechando que, con el objetivo de poder culminar el soterramiento, la circulación ferroviaria en el tramo entre Pola de Laviana y El Berrón permanece cortada desde finales de enero, con transporte alternativo por carretera. De esta forma, la tareas para retirar la catenaria del antiguo trazado en superficie, ya sin uso, que se habían iniciado en Sama, ya han llegado a La Felguera. En la jornada de ayer se pudieron ver equipos de operarios a la altura del estadio de Ganzábal y en las inmediaciones de Valnalón retirando cables, señales y postes. Previamente ya se habían quitado las vías en buena parte del tramo. La urbanización de los terrenos liberados por las obras del soterramiento de las vías permitirá construir un bulevar central a la altura de Valnalón con un paseo peatonal rematado con zonas verdes, carriles bici y distintos elementos de mobiliario urbano.